lunes, 28 de junio de 2010

León


Miren esto:
Si este blog tuviera miles de visitas al día, me vería forzado a explicar lo que es eso.

Pero aunque no las tenga y los que sí entran ya sepan qué es eso lo voy a explicar. Porque ese pedo está increíble.

Ese es el logotipo de un festival, llamado Cannes Lions International Advertising Festival... o sólo "leones" para los amigos.

A ver... primero... ¿por qué es allá?, ¿qué es lo que tiene de especial esa ciudad?... según leí, en WIKIPEDIA, osea una de las fuentes menos confiables del mundo, el primer festival de "cine" data de 1932 en Italia.

La historia de nacimiento de los festivales de cine franceses es simple:

Francés: Mi película está chida.
Italiano: Nel, la mía está más chida.
Francés: Entonces voy a hacer mi propio festival. (trompetilla)

Listo.

Pero la historia del festival publicitario es diferente.

Publicista: Yo quiero uno de esos.
Cineasta: ¿de cuáles?... ¿de estos?

Publicista: Sí... quiero uno... también es cine... son ideas.
Cineasta: Sí a huevo, tienes razón, yo podría hacer comerciales y ganarme uno con un comercial. Venga.

Y se creó la primera edición del Festival Publicitario Internacional... en 1954... en ITALIA.

El trofeo está inspirado en los leones de la Plaza de San Marcos en Venecia. Para asegurarse de que no estoy mintiendo haz click aquí, pero confía, ¿por qué carajo mentiría en esto?

Dos años después se mudaron a Cannes, en Francia.

Después dijeron: "Está muy jalado, que haya categorías". Y las hubo.

Después dijeron: "Que ya sea acá en Cannes... es la tradición". Y lo es.

Después hubo una guerra... y guerra significaba crisis... por lo que la industria tenía que ser e-du-ca-da por los publicistas más chingones del mundo... "Que haya conferencias y seminarios" las hubo y el festival ganó PRESTIGIO.

Dejó de ser sólo de FILM, también hubo prensa, exteriores, jóvenes creativos... y cyber... en 1998.

A ver... a ver... ¿neta en 1998 ya se estaba premiando la publicidad online?... En México apenas y sabíamos lo que era ese pedo, y me refiero a la palabra "online", cuando en Cannes ya había premios sobre eso.

Después hubo radio... y TITANIUM LIONS... ¿ah chingá?... ¿qué es eso?... una categoría creada debido a que había ideas que no entraban en una sola categoría, era una campaña de comunicación a través de diversos canales y tan única que no podía juzgarse de manera convencional... osea, ideas de "chinga tu madre".

Diseño, promo, media, campaña integral, jurados especializados en cada categoría, relaciones públicas, seminarios de de innovación en comunicación global, Gran Prix for the good, osea un premio por una idea que ayude al planeta y a la humanidad... wey... this is some serious shit we are talkin' here. Serious shit.

Wey... no mames, quiero uno de esos.

Y desafortunadamente en México nos cuesta mucho trabajo ganarlos.

Algunas veces, tenemos que recurrir a mandar anuncios que las marcas no publican.

Ideas increíbles que se quedan en los cuadernos porque son muy arriesgadas o irreales.

Te piden ser "realista".

"Realista"... esa palabra que se ha puesto de moda... ese estilo de vida... esa filosofía... ese statement que pretende humillarte y pisotear todas tus aspiraciones: "Yo soy realista".

Pues yo no quiero ser realista.

El Festival de Cannes es un festival de soñadores. O por lo menos ese debería ser el objetivo, aportar una pequeña idea a esa organización que premia las ideas en comunicación que están cambiando el mundo. Porque sí, yo estoy convencido que la publicidad puede cambiar la vida de las personas.

Cambió la mía.

Ser realista sería trabajar todos los días sabiendo que es imposible ganar uno.

Debes trabajar todos los días para ganarte una de esas madres porque no tienes ninguna... el problema es que no lo hacemos, estamos muy ocupados con la realidad.

Y cuando lo hacemos, buscamos la satisfacción personal del "reconocimiento". Osea, poder decir "soy chingón".

Pero lo importante no es el premio.

Lo importante es que sea una idea increíble.

Las ideas que ves en ese Festival son increíbles. Las juzgan los mejores del mundo en lo que yo hago.

Deberíamos admirarlos. Querer aprenderles.

Los pesimistas piensan: "Nunca voy a ganar uno".

Los optimistas piensan: "Algún día me voy a ganar uno".

Pero los "realistas" piensan que la publicidad es una pendejada. Que no puedes sentirte escritor cuando redactas un anuncio. Que eso ya se ha visto. Que la mejor manera de cambiar algo es quejándose. Que no pueden encontrar pasión en nada. Que piensan que admirar a alguien bueno en esto está mal. Que una campaña publicitaria les parece poco.

Y todos nos volvemos realistas.

Dejamos de creer... en ganarnos un león de Cannes, en la capacidad de poder tener una idea que cambie el mundo, en nuestro país... en nosotros.

Cuando dejamos de soñar dejamos de creer en nosotros.

Volvemos a la realidad, donde no podemos hacer nada.

No quiero un país de realistas.

Quiero un país de soñadores.

De personas que tomen en serio esa oportunidad que tienen todos los días de cambiar algo o a alguien.

De que algo mejore.

Cualquier cosa.

Hasta un anuncio.

Seamos menos realistas y mejoraremos todo.

Seamos menos realistas y ganaremos más leones en Cannes.

Un realista diría: "Gánate uno y creeré en ti".

Prefiero escuchar a los soñadores.

Un soñador diría: "Creo en ti, te vas a ganar uno".

1 comentario:

  1. Un día yo puse que desgraciadamente somos un país creativo que valora poco las ideas; una muestra clara son los partidos políticos que siempre dicen el candidato será el mejor posicionado, y no así el que tenga mejores ideas, mientras aprendamos a darle valor a esas ideas, quizá no se necesite un premio, para reconocerlas, México entero tendría su León de Oro..

    Abrazo

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